El siguiente post es parte de los contenidos que mes a mes realizamos junto a Kitadol Forte, en los que te entregamos información útil y valiosa relativa al mundo laboral, autocuidado y empoderamiento femenino.
Un estudio definió como procrastinación "la primacía del estado de ánimo a corto plazo (...) sobre la búsqueda a largo plazo de las acciones previstas".
Una de las razones de por qué las personas necesitamos un poco de tiempo para que nuestras pensar en soluciones creativas o innovadoras, es que cuando dejamos de lado eso que tenemos que hacer o crear, el cerebro continúa buscando soluciones a un nivel inferior de la conciencia, hasta que encuentra una solución.
Por eso, varios estudios apuntan a que la cantidad adecuada de distracción puede ser clave para la innovación.
Procrastinación productiva
¿Te ha pasado que cuando más te esfuerzas por tener buenas ideas o encontrar una solución a un problema, te sientes menos creativa?
Según un estudio, cuando pasamos mucho tiempo enfocándonos en un mismo problema, tendemos a pensar, principalmente, en soluciones obvias. Un periodo de incubación de las ideas sería, en este caso, una buena forma de ampliar nuestra perspectiva. Según el mismo estudio, la incubación puede funcionar mejor cuando nos alejamos del problemas y nos enfocamos en una tarea relativamente fácil, para que así, nuestra mente pueda vagar libremente.
Eso sí, la clave de la procrastinación productiva es la moderación. Un estudio demostró que las personas que se tomaban descansos breves para hacer lo que tenían pendiente hacer, tendían a generar ideas mucho más creativas que las personas que procrastinaron muy poco o demasiado.
Los 5 pasos del proceso creativo
Según James Clear, autor del bestseller "Hábitos Atómicos", existen algunos pasos que podemos seguir para reactivar la creatividad, y salir del bloqueo mental o de la procrastinación:
- Investiga y reúne nuevas ideas: Busca otras fuentes de inspiración, incluso si no están relacionadas directamente con tu trabajo o proyecto. La inspiración puede venir de muchos lugares inesperados.
- Analiza: Mira una situación o idea desde diferentes ángulos, y pregúntate si es algo que puede ayudarte a potenciar tu trabajo.
- Aléjate de la idea: Olvídate del problema que está ocupando tu mente, y enfócate en otras cosa que te emocionen y te den energía.
- Vuelve a la idea: En algún momento, y solo después de que hayas dejado de pensar en eso que te preocupa, tu idea volverá con energía creativa renovada.
- Aprende de la retroalimentación: Para que cualquier idea tenga éxito, debes lanzarla al mundo, someterla a críticas y adaptarla según sea necesario.
Esperamos que estos consejos te hayan servido, y que la próxima vez que te sientas mal por darte un tiempo para salir del problema o estancamiento creativo, y volver con otra mirada, recuerdes que la procrastinación también puede ser altamente productiva y eficaz para la innovación.