En la columna de hoy, la directora de arte y socia fundadora de Estudio Como, Sysla Osorio, nos cuenta cómo enfrentar los miedos y atreverse a hacer lo que uno ama. Además, nos entrega algunos consejos prácticos para lograrlo y así ser más feliz. ¡Te invitamos a leerla!
Este post es algo así como un homenaje de lo aprendido y una puesta en práctica de los conocimientos que transmite la gran Charuca, una mujer inspiradora, dueña de un imperio en papel terapia, con un podcast y un libro que llevan por título el de esta columna. Si no la conocen, ¡vayan ya mismo a escucharla!
Por muchos años me sentí obligada a participar de un sistema que no me acomodaba, haciendo lo que estaba programado para mí, lo lógico: trabajar en una empresa, agencia, estudio de diseño, etc, con sus reglas establecidas.
No lograba acostumbrarme a seguir patrones día tras día, los mismos horarios, ir todos los días al trabajo hubiese pega o no, mismos compañeros… Me frustraba mucho el no poder decidir cómo quería vivir mi vida.
No veía otra forma, eso era y nada más. Miraba otras opciones como el freelance o tener un proyecto personal como algo muy lejano, inalcanzable. Pensaba, “eso es para gente que tiene plata y contactos”, situación que no era en absoluto mi caso a los 24 años.
Pasaron varios años, y llegó un punto en que el ritmo que llevaba era insostenible y así lo manifestaba mi cuerpo; subí 8 kilos, me dolía la guata los domingos de tan sólo pensar que se venía la semana, estaba irritable, muy cansada, y lo peor, sin ganas de trabajar en lo que me gusta: ¡la dirección de arte que tanto amo! Así que decidí renunciar, algo que ya venía pensando, pero que me daba susto concretar.
Ya más tranquila y después de unas vacaciones, decidí hacer la pega a la inversa y pensé: “¿Qué es el éxito para mí? ¿Qué quiero?”
Y descubrí que lo que buscaba era un estilo de vida que me permitiera trabajar en lo que me gustaba, y la única manera que vimos con mi marido Richy de lograrlo, fue ser nuestros propios jefes. Fue así como formamos @estudiocomo.cl.
¡Pero ojo! Que esto no va de ser literalmente tu jefa al mando de un proyecto, se trata de sentir que puedes decidir cómo vas a vivir tu vida, cómo vas a administrar tu tiempo, tus platas, tus objetivos. No sólo fluir en “lo que te tocó” porque nada es así, el lugar en el que estamos es decisión de cada una y depende de nosotras cambiarlo.
A mí me funciona emprendiendo en mi estudio, a otras amigas por ejemplo, les gusta trabajar en una empresa que les de seguridad, que las ordene con el horario y con un sueldo cada mes, ¡y está súper bien! Lo importante es saber a ciencia cierta cuál es tú camino, el que elegiste porque te gusta, y no el que vives porque no te queda otra.
Para ser jefas de sus vidas, estos consejos que estoy poniendo en práctica les pueden servir:
- Pregúntate si estás donde quieres: Si no es así, crea un plan de acción que te ayude a estar cada vez más cerca de tus objetivos. Pueden ser pequeñas cosas al principio. Luego vas aumentando hasta conseguir tu propósito.
- Aprende a decir que no: Cuesta, no estamos acostumbrados como sociedad a hacerlo. Desde que no queremos ir a un carrete por ejemplo, porque no tenemos ganas, no tomar pegas que no nos gustan, decir no a amistades que no aportan, etc…
- Cuidar de nosotras: Nuestra alimentación, nuestros horarios de descanso, los momentos para estar solas, con amigos, los momentos de relajación, de ejercicio.
- Confiar en ti misma: Tener la convicción de que con un plan se puede alcanzar el objetivo que te propongas, ¡nada es tan lejano como uno piensa!
- Olvidarse de lo que opinan los demás: Siempre va a ver alguien que te de su opinión sin que se la pidas ¡Que no te importe! Lo importante es lo que TÚ creas.
- Rodearse de personas inspiradoras: Tener gente que sume a tu lado, siempre es una buena opción, te hace crecer, empatizar y sentirte acompañada en el camino. Participar de charlas, eventos y pertenecer a una comunidad como ésta, es una gran ayuda.
Espero que mis consejos las motiven a cambiar lo que no les gusta, porque siempre existen opciones, sólo hay que aprender a trazar un plan y luchar por conseguirlo.
¡Las invito a todas a ser jefas de su vida! Suena difícil, pero en verdad chiquillas no lo es. Basta sólo con proponérselo y creer fielmente en ustedes.