La pandemia, a muchas, nos ha obligado a compartir los espacios de trabajo en casa, ya sea con los hijos o la pareja. Y bueno, mantener todo ordenado cuando se comparte un escritorio puede ser algo difícil: papeles por aquí, lápices por allá, sillas cambiadas, tazones o vasos por toda la mesa… sí, lo sabemos.
Por eso, independiente de los metros cuadrados con que contemos, es importante lograr un espacio armónico, cómodo y bien organizado, no sólo para ser realmente productivas, sino por el bienestar de todos los integrantes de la casa.
Así que para evitar discusiones o malos ratos, hoy te queremos dar 5 soluciones que te ayudarán a mantener bajo control tu escritorio compartido.
1.- Mueble separador
Da lo mismo si el espacio es pequeño o si el escritorio no es muy grande. Es importante poder definir cada “estación de trabajo”, poniendo límites físicos y concretos. Para eso, recurre a elementos como organizadores para lápices o carpetas, que puedes poner al centro y así definir el campo de acción de cada persona.
Otra alternativa, es usar cajoneras que pueden ir bajo la mesa y que crearán esa sensación de separación entre ambos escritorios.
2.- Espacio para almacenar
Otra buena idea es tener un mueble donde puedan mantener las cosas guardadas y organizadas. Es importante que cada persona cuente con su propio espacio de almacenamiento: puede ser una cajonera, un closet, o cajas organizadoras. Estas últimas, incluso, pueden estar marcadas con el nombre de cada integrante de la familia.
Comprométanse a mantener todo lo más ordenado posible, esto evitará que las cosas anden dando vueltas, se confundan o pero aún, se terminen perdiendo.
3.- Repisas flotantes
Si el espacio no es muy grande, una buena solución son las repisas flotantes, porque son livianas visualmente, fáciles de instalar y súper versátiles. Pueden ponerlas sobre los escritorios y así mantener organizados los documentos, artículos de oficina, tareas, etc. Incluso, si el espacio lo permite, pueden agregar decoraciones o plantas para darle más color y vida al espacio.
4.- Equilibrio de estilos
Quizás eres amante del estilo nórdico, tu pareja del industrial, y además deben compartir la oficina con los niños. En gustos no hay nada escrito, y por eso es importante que antes de definir el espacio de trabajo compartido, se sienten y conversen sobre qué estilo decorativo tendrá. Esto es no sólo es importante por el look general, sino porque da más ganas de trabajar en un espacio equilibrado.
Hagan una lista de los estilos que más les gustan, de los colores y muebles favoritos y lleguen a un acuerdo, ¡así será un lugar que los represente a todos!
5.- Sello personal
Y si bien, en términos generales la idea es lograr un espacio de trabajo armónico, también es importante que cada integrante de la familia pueda darle su toque personal y único.
Si tienen la posibilidad de tener un puesto de trabajo para cada uno, entonces háganlo propio, con detalles que los caractericen. Una linda forma de conseguirlo es con decoraciones en el muro, como fotos, cuadros o incluso una rejilla donde puedan poner recortes, imágenes inspiradoras o dibujos.
Trabajar en casa a ratos puede ser difícil, sobre todo si compartes el espacio con más personas de tu familia. Por eso, es importante que puedan lograr un espacio lindo y cómodo para todos. ¡Esperamos que les hayan gustado estos consejos!