El siguiente post es parte de los contenidos que mes a mes realizamos junto a Kitadol Forte, en los que te entregamos información útil y valiosa relativa al mundo laboral, autocuidado y empoderamiento femenino.
¿Estás buscando tu primer trabajo? Quizás has querido postular a algunos, pero el hecho de no tener experiencia o un currículum robusto te ha hecho dudar. ¡No te preocupes!
Es algo por lo que muchas hemos pasado, y si bien tener camino recorrido laboralmente es importante, obviamente no es imprescindible. La clave está en cómo te presentas ante un eventual empleador, y es ahí donde tu CV juega un rol fundamental. ¿Quieres saber cuáles son las claves para redactarlo? Aquí te las dejamos.
Destaca tus fortalezas y habilidades
Quizás no habrá mucho que decir en términos de trabajos anteriores, pero sí puedes destacar aquellas habilidades que te hacen la mejor candidata para el puesto. En este sentido, te recomendamos que incluyas las habilidades duras, es decir, los conocimientos técnicos que has adquirido en tu formación académica. Puede ser el manejo de algún programa computacional, manejo de herramientas tecnológicas o incluso otro idioma.
Por otro lado, es importante que destaques tus habilidades blandas, que están relacionadas con tu personalidad y cómo te relacionas con los demás. ¿Eres una buena líder, te gusta trabajar en equipo, trabajas bien bajo presión, etc? Además, puedes incluir tus intereses o alguna otra actividad que te guste realizar, como algún deporte, trabajo social, hobbie, etc.
Escríbelo en tercera persona
Si bien puede sonar algo extraño y dependerá mucho de la empresa a la que estés postulando, opta por escribir tu currículum en tercera persona.
Esto, porque es el reflejo de tu experiencia académica y -eventualmente- profesional, lo cual debe visualizarse de la manera más objetiva posible. Además, le da un carácter más oficial y formal.
Incluye otras experiencias profesionales que hayas tenido
Sabemos que este es tu primer curriculum y que quizás no tengas experiencia en el área en la cual te quieres desempeñar. Sin embargo, puede que hayas realizado otro tipo de trabajos en otro sector.
Haz un filtro y revisa qué experiencia previa se ajusta al perfil que piden; quizás ese puesto como vendedora en una tienda refleje tu interés por la atención al público, o las fotografías para redes sociales que tomaste para esa pyme demuestran tu pasión por el diseño y las artes.
En esta misma línea, agrega siempre tus ayudantías o prácticas laborales, si las realizaste.
Redáctalo de manera inversa
Debes saber que tanto tus estudios como experiencia profesional deben estar redactadas desde lo más actual a lo más antiguo, para que así, la persona que lo lea, sepa qué es lo último que has estado haciendo.
Agrega una carta de recomendación
Una carta de recomendación será el complemento perfecto a tu curriculum, sobre todo si no cuentas con experiencia previa. Puedes pedírsela a algún profesor o jefe que hayas tenido.
En ella es importante que la persona hable de tus habilidades, de tu profesionalismo y tu capacidad para realizar un buen trabajo. Este es un excelente recurso para obtener una mirada más objetiva de tus capacidades y mostrar aspectos diferentes que no podrás incluir en tu CV.
Hazlo preciso y nunca mientas
Elabora un currículum corto y concreto. Evita la información innecesaria, ya que el reclutador podría aburrirse al leer datos poco relevante y finalmente, rechazar tu postulación.
Por otro lado, jamás mientas en la información que entregues ya que podría jugarte en tu contra. ¿Qué pasa si dices que hablas un inglés fluido y te piden realizar una prueba oral?
Consejos finales…
Existen muchos formatos de curriculums, sin embargo, te recomendamos que elijas un diseño simple y minimalista, donde lo principal sea la información. Utiliza colores siempre y cuando sirvan para estructurar el texto, lo mismo con íconos o figuras. Un exceso de elementos puede saturar visualmente el documento haciendo que sea difícil de leer.
Pon mucho ojo a la ortografía y procura siempre utilizar un lenguaje profesional.
¿Cómo estructurar un currículum?
Finalmente, nunca está de más repasar la estructura de un currículum, sobre todo si es el primero que vas a realizar.
1.- Datos personales: Además de tu nombre, apellido y teléfono, es importante que cuentes con un correo electrónico profesional y que uses diariamente. Agrega también tu perfil de LinkedIn, o el link a tu blog o página web si es que los tienes.
2.- Objetivos y breve descripción: Luego de tus datos, puedes agregar una pequeña descripción que incluya tus objetivos profesionales, tus expectativas y el valor que como profesional podrás entregarle a la empresa. Hazlo preciso y claro.
3.- Experiencia laboral: Si bien puede que no haya mucha información en este apartado, recuerda incluir tus prácticas laborales, u otros trabajos que puedan servir para el puesto al cual estás postulando.
4.- Formación académica: Incluye tu educación, profesional o técnica. Recuerda incluir minors, magísteres o másteres que puedas estar realizando (o que quizás ya realizaste). Asimismo, agrega cursos o talleres de perfeccionamiento, seminarios o congresos a los que hayas asistido.
5.- Conocimientos técnicos: Agrega tus conocimientos computacionales, de herramientas tecnológicas o idiomas. Detalla cuál es el nivel de manejo de esos conocimientos: si es básico, intermedio o avanzado.
6.- Otros datos de interés: Agrega cualquier información que pueda ser de interés para el puesto que está solicitando, algún viaje, premio que hayas recibido, si cuentas o no con licencia de conducir, etc.
Con estos consejos estamos seguras que podrás hacer un curriculum increíble y que te ayudará a dar tu próximo paso profesional. ¡Muchísima suerte!
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